Papa Francisco fue el primer pontífice latinoamericano y jesuita de la historia
Jorge Mario Bergoglio fue elegido como el encargado de liderar a la Iglesia Católica en 2013. Su deceso se produjo apenas un día después de que hiciera una aparición pública desde el balcón de la basílica de San Pedro.
El papa Francisco, fallecido este lunes a los 88 años, estuvo 12 años en el Vaticano desde su designación como líder de la Iglesia Católica en el 2013.
Jorge Mario Bergoglio, de nacionalidad argentina, fue el primer papa no europeo y también el único jesuita que resultó elegido aquel 13 de marzo de 2013, después de que durante las reuniones previas al cónclave convenciese a una mayoría de cardenales con un discurso de cambio y de descentralización de la Iglesia.
El papa Francisco nació en Buenos Aires en 1936, en una familia de origen italiano y comenzó su carrera en la Iglesia con 21 años tras estudiar ciencias químicas. Fue ordenado sacerdote el 13 de diciembre de 1969 y, en plena dictadura militar argentina, entre 1973 y 1979, fue enviado a Alemania, de donde pasó a la iglesia de la Compañía de Jesús de Córdoba.
Bergoglio vivía solo, en un apartamento, en el segundo piso del edificio de la Curia, al lado de la Catedral de Buenos Aires, en el corazón de la ciudad y como papa dejó los apartamentos pontificios para ir a vivir a la Casa Santa Marta, una residencia para los sacerdotes de paso por Roma.